Una vez llegamos, hicimos una primera parada para desayunar, picnic improvisado tomando el sol en unos bancos. Algunos fuimos a tomar algo a un bar de al lado (donde no tenían Coca-Cola ya que era un bar ecologista!) y luego fuimos al refugio 307.
El refugio estaba situado en la falda de la montaña de Montjuic, un poco alto. Se presentó la guía que luego nos enseñó el refugio. Era una chica joven, competente y muy seria, que primero nos explicó unas fotos históricas que habían en la entrada, y luego nos hizo dar un paseo por todo el refugio, explicándonos los diferente lugares (fuente, habitaciones de enfermería, lavabos) y las historias y anécdotas del refugio. La guía explicó bien y cosas muy interesantes, desde aquí la felicitamos de nuevo. Los compañeros eran los de siempre, Josep Lluis (que fue en silla de ruedas), Paco, Albert , Antonio y yo. Ninguno tuvo problemas y todos disfrutamos de la salida. La accesibilidad del refugio era bastante buena, ya que el suelo estaba arreglado con cemento.
Nos explicaron que esos túneles eran un refugio para las personas de Barcelona (mayoritariamente republicanos) durante los ataques en la Guerra Civil de los aviones del lado nacionalista, bajo el régimen de Francisco Franco. En estos túneles habían refugiadas unas 2000 personas. Este refugio fue mayoritariamente construido por niños, jóvenes y mujeres, y fue construido en plano, no como la mayoría de los refugios cavando hacia abajo. En las paredes habían escritas normas, para su cívico cumplimiento y las buenas relaciones entre sus moradores.
Los 5 compañeros de Trace, la guía Leila, Julieta y Estefanía.